PLAYBACK
¿Vieron esa escena de la película "Infidelidad" (la de Richard Gere), donde Connie (Diane Lane), la esposa infiel, está volviendo en el tren después de su primer encuentro sexual con su amante, y va recordando parte por parte y detalle por detalle cómo fue ese momento, y se va sonrojando, y se ríe, etc...? Bueno, las mujeres somos así. Esa escena nos representa por completo.
Suele suceder, que los días subsiguientes a una buena y agitada noche con un muchacho, usemos nuestra super memoria para recordar con la cronología perfecta todo lo que fue pasando. Momento a momento. Segundo a segundo. Cada beso, cada mirada, cada caricia. Cómo nos fuimos desvistiendo, qué posiciones adoptamos. Qué palabras nos dedicaron. Todo.
Y en general, los lugares elegidos para esta actividad, son aquellos donde pasamos
tiempos muertos, es decir: en el subte, en el tren, en el bondi, en la cola del banco, en la sala de espera del consultorio de un médico. Recordamos, rememoramos, resentimos y sí: nos sonrojamos, nos reímos, nos colgamos.
Así que, ya saben, caballeros: esfuércense. Hagan nuestras noches memorables. Les aseguro que el resultado no es solamente haber pasado ese buen momento. A nosotras nos sirve para seguir fantaseando y recordándolo un buen rato más. Y a veces hasta nos impulsa a volver a llamarlos. Ya sea para repetir o porque de tanto pensarlos, se nos ocurrieron "cositas nuevas" para hacerles la próxima vez.
|